Pésaj es una época para reflexionar sobre nuestra historia, recordando cómo nuestros antepasados se liberaron de la esclavitud y emprendieron su camino hacia la libertad. Esta festividad no es solo una remembranza del pasado, sino también una fuente de inspiración para nuestro presente y futuro.

Los eventos del 7 de octubre marcaron un drástico punto de inflexión, dividiendo nuestra vida en un ‘antes’ y un ‘después’, con la masacre más masiva de judíos desde el Holocausto. El repunte del antisemitismo en el mundo nos recordó que el odio hacia los judíos no ha desaparecido, simplemente se ocultaba tras una máscara de civilidad.

Los judíos de todo el mundo despertaron a una nueva realidad que dejó al descubierto nuestras debilidades y disipó ilusiones. Una verdad sigue siendo inalterable: la supervivencia de nuestro pueblo solo es posible a través de nuestra unidad, teniendo a Israel como su núcleo.