Alía y la unidad sionista: se llevó a cabo una reunión en Nueva York dedicada al futuro de Israel
En la sede de la Organización Sionista Mundial (OSM) en Nueva York, se llevó a cabo una reunión dedicada al futuro de Israel. El evento fue organizado por la división norteamericana del Departamento de Promoción de Aliá. Entre los participantes se encontraban periodistas y representantes de comunidades judías.
La reunión fue inaugurada por su iniciadora, la Jefa del Departamento de Promoción de Aliá de la OSM Marina Rozenberg-Koritny. Ella enfatizó que la aliá (repatriación) no es solo el retorno de los judíos a su patria histórica, sino también una condición crucial para el desarrollo futuro del proyecto sionista, garantizando el futuro del Estado de Israel. Marina expresó su esperanza de que los rehenes israelíes retenidos por los terroristas de HAMAS sean devueltos.
Herbert Block, director ejecutivo de la sección americana de la OSM, habló sobre las próximas elecciones al Congreso Sionista de 2025. Destacó la actividad de los judíos americanos en las elecciones de 2019 y espera que el número de votantes aumente significativamente esta vez. Prestó especial atención a la importancia de la comunidad judía de habla rusa en EE.UU. en apoyo a Israel.
Anton Sh., ex oficial de inteligencia de Israel, habló sobre los desafíos que enfrenta la sociedad israelí durante la guerra. «La realidad es que muchos reservistas han dejado a sus familias, sus trabajos y negocios para servir en el ejército», señaló en su discurso Anton Sh. «y esta ausencia de hombres y mujeres se refleja en todos los aspectos de la vida. ¡Pero demostraremos que los israelíes son más fuertes que todo esto!»
La portavoz del IDF, mayor Anna Ukolov-Harish, habló sobre el papel de las relaciones públicas en fortalecer la unidad sionista y establecer relaciones entre Israel y las comunidades judías de diferentes países.
La intervención de Olga Rizkov, madre de un soldado israelí caído en los primeros días después del ataque de HAMAS, provocó una respuesta emocional especial. Habló sobre su hijo Máximo, quien sirvió en las fuerzas especiales. Su muerte heroica se convirtió en un ejemplo de resistencia y valentía. «No se llora a los héroes caídos — a los héroes se les aplaude», dijo Olga, y la sala la recibió con aplausos de pie.
Marina Rozenberg-Koritny: «La reunión transcurrió en un ambiente de solidaridad asombrosa y demostró la importancia de los valores sionistas, que continúan inspirando a judíos de todo el mundo».